Zen Sabiduría Inmóvil

  Cuando la nostalgia viene a mi  solo recuerdo la playa, las olas y su danza, destellos de mi en añoranzas reveladas limerencia entre la espuma, la arena y tu mirada. El petricor sobre los montes asoleados tratado sobre los amores olvidados, lo profundo de mis recuerdos adosados el océano y los deseos empolvados. El aire desdibuja un abrazo para el alma mientras la bruma acaricia la añoranza, las gaviotas juguetean con sus alas, y el mar... el mar siempre conforta con su calma. "El mar es un tratado de paz entre la estrella y la poesía".  Alain Bosquet

Tu silueta enciende almenaras al desvelo cobran brios en el rojo atardecer de tus cabellos,  anidado en el verdor de tu profundo oteo yace escondido el más recóndito deseo.  Pecas trazan sobre ti constelaciones latentes el mar acaricia tu piel nacarada en sus rincones, un beso furtivo hurto de tu boca con la mente despertando así el mundo onírico en pasiones. Sin preámbulos tu imagen me toma por instantes tatuando celos inefables sin razones, tan solo soy un simple observador de tus albores, Por antonomasia ajeno a tu mundo e ilusiones. Me embriagas con vehemencia con tu abrazo consumido en un ardor tan sempiterno, embebido en tu ser tan solo pienso ¡Como perturba el sueño lo que siento!. "El mar no tiene caminos, el mar no tiene explicaciones".  Alessandro Baricco

  "Si eres incapaz de encontrar la verdad justo donde estás, ¿dónde esperas encontrarla?" Dogen

  Ayer soñé que me amabas de nuevo, caminamos esos paisajes oníricos que solo un alma embriagada con los sutiles alegrías de los años puede crear, nos tomábamos las manos con la plena intención de jamás soltarnos, nos abrazamos sin que el tic tac del reloj importara, no había segundos, minutos que contar, éramos solo nosotros y el mundo. Tu risa inundaba el ambiente, el aire era tu aliento y el cielo tus ojos como antaño, la brisa vespertina me tomaba de sorpresa tocándome los labios hurtando un beso cada tanto tiempo, las gaviotas tejían su danza en el cielo y el sol me acariciaba con su cálido roce. Y desperté... nos miramos sin poder vernos, así a la distancia pensamos lo mismo, porque estando cerca o estando lejos siempre ha sido igual, estamos y ya, pensando al unísono: "Cómo quisiera tener 16 años de nuevo, sería todo tan igual y a la vez tan diferente, se que te buscaría, se que aún sin saber uno del otro nos encontraríamos, porque serías tu y yo sería yo.... Además ya sabe...

  Soy prisionero de mis temores, los lobos de pensarte devoran mi alma, deshacen mi corazón a pedazos de solo imaginarte ajena naufragando en otra mano... puerilmente sigo pensando que eres mía cuando lo único que poseo es mi propio aliento... navegando, añorando y soñando viviré surcando el mar de la vida. A pesar de eso sigo preguntando... Me seguirás amando cuando se acabe el día?...

  Pintura: Brouillard à Guernsey  Autor: Pierre-Auguste Renoir  Estilo: Impresionismo  Género: Paisaje  Año: 1883 Cuando contemplo la inmensidad del océano, mi mente vuela hacia esos imaginarios que construyo a diario para sentirme más vivo, para que la rutina no consuma el espíritu en su intento de querer salir volando de la existencia, esa existencia que me condena al aquí y al ahora, mi vida cobra significado solo a través de los míos, pero más allá de eso me toca cargar con el peso de un alma solitaria, un alma que se embriaga a diario en la neblina de dar significado a un mundo que lo supera, es solo a la luz de la contemplación y toma de consciencia de mi efímera presencia en el camino, que me percato que soy tan solo el reflejo de un alma torturada por sus propias indecisiones. Isaias Ruiz

  "El viento jugueteando en el palmar aún hasta hoy sigue susurrándome tu nombre" Isaías Ruiz